LAS PLAGAS VERTEBRADAS EN LOS CAMPOS DE GOLF
Los que nos dedicamos a mantener los campos de golf estamos habituados a tratar con las plagas que dañan el césped y, que normalmente, son insectos más o menos visibles. Pero de vez en cuando, nos encontramos con plagas menos habituales, las plagas vertebradas.
Una plaga vertebrada se contrasta con el concepto de condición de plaga, al asumirse que ninguna especie vertebrada es plaga de manera permanente, sino que una determinada población puede adquirir esa condición en un momento y lugar específicos.
Una definición útil para entender qué es una plaga vertebrada, es la siguiente: “Especie de mamífero, ave, reptil, anfibio o pez que afecta directa o indirectamente a la especie humana, ya sea porque provoque daños en las áreas de producción, consuma o contamine alimentos almacenados, cause daños en la infraestructura, transmita enfermedades o provoque la muerte a personas o animales domésticos”
Depende mucho de dónde se encuentre el campo de golf para saber el tipo de plagas que uno puede encontrarse, perros, marmotas, topos, caimanes, ratas, ganado, caimanes, aves, y otros.
En este caso, la plaga afecta a las áreas de producción y causa daños a la infraestructura.
Estos sucesos no son nuevos, los jabalíes suelen ser de las plagas más habituales y que más daño causan en los campos de golf, debido a que son capaces de levantar grandes superficies de césped en una noche de trabajo, aunque por suerte, nunca dentro de un green.
Los greens son más de perros que le cogen cariño a un green para orinar o de los patos para defecar. Las ratas son más de roer cables y dañar el sistema de riego. Y también están los caimanes, que salvo algún susto a algún golfista despistado no crean mayores problemas.
En esta oportunidad, se muestra el daño causado en la superficie de un green por las pezuñas de un grupo de vacas, que le han cogido gusto a pasar por encima de un green en su camino a pastar en la casi ilimitada comida que han encontrado en los roughs en esta época del año.
Tomará horas reparar manualmente el daño para dejar una superficie de juego decente y una semana o más en que no se note.
Así es que sí, en los campos de golf, también tenemos que ocuparnos de ponerle puertas al campo.
Y por último, por si alguien se lo estaba preguntando, los vertebrados de dos patas (humanos) suelen ser los que más daños causan, pero eso lo dejaremos para otra ocasión…
Autor: Antonio Márquez, Director de Panamá en Green Garden Corp.